Sueños rotos.

De pequeño tus padres te entregaban una pequeña caja y te decían:
“Dentro encontrarás tus mayores sueños”


Tú, con esa inocencia que nos caracteriza de niño, la abres entusiasmado.
Pero al abrirla descubres que la caja está vacía, no hay nada dentro de ella.
Les dices: “Aquí dentro no hay nada. Está caja está rota”


Desilusionado, abandonas la caja, la dejas tirada, te olvidas de ella.


Hasta que un día te haces mayor y vuelves a encontrar esa dichosa caja.


La abres de nuevo después de muchos años y la vuelves a encontrar vacía.
Piensas: “¡Qué estúpido fui de pequeño”

Hasta que llega un día y te das cuenta de que, quizá si hayas cumplidos tus sueños:


Estás haciendo lo que amas, eres feliz, tienes alrededor a personas que te quieren y te apoyan. No puedes pedir más.


Quizás la caja no estaba tan rota como tú creías, ¿no?

Sueños rotos…